La varicela es una enfermedad altamente contagiosa causada por el virus varicela-zóster. Afecta principalmente a los niños, pero también puede afectar a los adultos que no han sido vacunados o que no han tenido la enfermedad antes. La varicela se caracteriza por la aparición de ampollas en todo el cuerpo, acompañadas de fiebre y malestar general.
Prevención de la varicela
Vacunarse contra la varicela
La forma más efectiva de prevenir la varicela es vacunarse. La vacuna contra la varicela es segura y altamente efectiva, y se recomienda que los niños reciban dos dosis, la primera a los 12-15 meses de edad y la segunda entre los 4 y 6 años de edad. Los adultos que no han tenido la enfermedad antes también pueden vacunarse.
Mantener las uñas cortas y evitar rascarse
La varicela causa picazón intensa en las ampollas, lo que puede llevar a rascarse y provocar infecciones de la piel. Para prevenir esto, es importante mantener las uñas cortas y limpias. Además, se recomienda evitar rascarse y utilizar lociones con calamina o darse baños frescos con bicarbonato de sodio, avena sin cocinar o avena coloidal para aliviar la picazón.
No usar aspirina ni productos que contengan aspirina
El uso de aspirina en niños y adolescentes con varicela se ha asociado con el síndrome de Reye, una enfermedad rara pero grave que afecta el hígado y el cerebro. Por lo tanto, es importante evitar el uso de aspirina y productos que contengan aspirina para aliviar la fiebre. En su lugar, se pueden utilizar medicamentos sin aspirina, como el acetaminofeno, siguiendo las indicaciones del médico.
Llamar a un proveedor de atención médica en ciertos casos
Si bien la mayoría de los casos de varicela son leves y se resuelven por sí solos, hay situaciones en las que se debe llamar a un proveedor de atención médica. Estas situaciones incluyen:
- Si se está embarazada
- Si se tiene el sistema inmunitario debilitado
- Si la fiebre dura más de 4 días
- Si hay síntomas de infección bacteriana, como enrojecimiento, hinchazón o pus en las ampollas
- Si se presentan complicaciones graves, como dificultad para respirar, dolor en el pecho o confusión
En estos casos, es importante buscar atención médica para recibir el tratamiento adecuado y prevenir complicaciones.
Tratamiento para la varicela
Aplicarse loción con calamina o darse un baño fresco
Para aliviar la picazón causada por las ampollas de la varicela, se recomienda aplicar lociones con calamina o darse baños frescos con bicarbonato de sodio, avena sin cocinar o avena coloidal. Estos productos ayudan a calmar la piel y reducir la picazón.
Usar medicamentos sin aspirina para aliviar la fiebre
Si se presenta fiebre como resultado de la varicela, se pueden utilizar medicamentos sin aspirina, como el acetaminofeno, para aliviarla. Es importante seguir las indicaciones del médico y no exceder la dosis recomendada.
Consultar a un proveedor de atención médica en casos específicos
Al igual que en la prevención, hay situaciones en las que se debe buscar atención médica durante el tratamiento de la varicela. Estas situaciones incluyen:
- Si se está embarazada
- Si se tiene el sistema inmunitario debilitado
- Si la fiebre dura más de 4 días
- Si hay síntomas de infección bacteriana, como enrojecimiento, hinchazón o pus en las ampollas
- Si se presentan complicaciones graves, como dificultad para respirar, dolor en el pecho o confusión
En estos casos, es importante buscar atención médica para recibir el tratamiento adecuado y prevenir complicaciones.
Uso de medicamentos antivirales en casos prescritos
En casos específicos, un proveedor de atención médica puede prescribir medicamentos antivirales para tratar la varicela. Estos medicamentos pueden ayudar a reducir la duración y la gravedad de la enfermedad, especialmente en personas con mayor riesgo de enfermarse gravemente, como aquellas con el sistema inmunitario debilitado.
La prevención de la varicela se basa en la vacunación, el cuidado de la piel para prevenir infecciones y el uso adecuado de medicamentos para aliviar los síntomas. En caso de presentar complicaciones o situaciones específicas, es importante buscar atención médica para recibir el tratamiento adecuado. Recuerda que la varicela es altamente contagiosa, por lo que es importante tomar medidas para prevenir su propagación, como evitar el contacto cercano con personas infectadas y mantener una buena higiene personal.